La NASA quiere atrapar un asteroide y traerlo a la órbita lunar

La NASA ya ha aprobado un presupuesto para empezar a diseñar una misión que traiga un pequeño asteroide a la órbita lunar. En una antiversión del dicho de Mahoma y la montaña, pues se planea posteriormente el envío de una misión tripulada hacia el asteroide. Con ello se cumplirían los planes presidenciales de enviar una misión tripulada a un asteroide en los años treinta del presente siglo. Para ello se necesitaría el nuevo lanzador pesado (aún en desarrollo) de la NASA.

Una vez allí los astronautas analizarían el asteroide, tanto desde el punto de vista de la posible obtención de recursos minerales como las posibles técnicas que se podrían emplear para desviar uno de ellos en rumbo de colisión con la Tierra. Además se traerían muestras para su análisis en tierra. Ello permitiría caracterizar los asteroides cercanos a la Tierra y saber más sobre el origen del Sistema Solar. El presupuesto para el desarrollo inicial en 2014 es de 105 millones de dólares.

El asteroide elegido sería de unos 7 metros de diámetro y pertenecería a los objetos cercanos a la Tierra. La misión de captura consistiría en una sonda con un sistema inflable que durante la ida estaría contraído. Al llegar al asteroide se desplegaría el sistema, en forma de embudo, y se envolvería con él al asteroide. Una vez realizada esta operación, se desinfraría atrapando al asteroide en una especie de bolsa. Luego la nave empujaría el objeto hasta una órbita lunar. La propulsión de la nave automática sería iónica y estaría alimentada por energía solar. Es de suponer que se tardarían años en conseguir la nueva ubicación. Según la NASA la misión representaría un reto tecnológico.

De momento se ha aprobado un presupuesto inicial de 105 millones de dólares para investigar esta posibilidad en 2014, pero se está lejos de conseguirlo y aprobar totalmente la misión (o misiones). Se trataría de la primera vez que el ser humano realizase este tipo de ingeniería que modificaría el Sistema Solar, aunque fuera a pequeña escala.

Sin embargo es un poco decepcionante que las misiones tripuladas en los próximos años se reduzcan a visitar una pequeña roca que se ha traído hasta las cercanías de la Tierra. Si en tiempos de bonanza no se financiaban este tipo de misiones, menos se va a hacer en tiempos de crisis económica. Aunque, por otro lado, quizás sea mejor no hacer viajes tripulados si va a ser a costa del programa científico.

Fuente Observa Cosmo